La vida como herramienta terapéutica
12/10/2013. El potencial de la terapia celular, ya explorado desde hace décadas con los trasplantes de médula ósea para el tratamiento de enfermedades hematológicas, se ha visto ampliado con el descubrimiento y caracterización de células madre en otros tejidos del organismo. El diario La Verdad publica un reportaje sobre los avances en este ámbito del grupo de Terapia Celular y Trasplante Hematopoyético del Hospital Clínico Universitario Virgen de la Arrixaca de Murcia, dirigido por el doctor José María Moraleda.
Uno de los retos más importantes al que se enfrentan los cirujanos es el de tratar grandes heridas sufridas como consecuencia de traumatismos. Gregorio Castellanos, jefe de sección del Servicio de Cirugía General de la Arrixaca, ha encontrado en el equipo de terapia celular del hospital un gran apoyo para resolver estos problemas. Las heridas traumáticas complejas, con importantes pérdidas de piel y partes blandas, requieren una amplia limpieza quirúrgica para facilitar su granulación y cierre, lo que dificulta la cicatrización. Los implantes de membrana amniótica, de la que se han conseguido aislar células madre epiteliales y mesenquimales con gran capacidad de diferenciarse, aportan una nueva estrategia para facilitar la epitalización de este tipo de heridas complejas. Además de aportar células madre, la membrana amniótica tiene una estructura gelatinosa que sirve como apósito biológico, con propiedades anti-inflamatorias, inmunorreguladoras y antisépticas. Resulta un tejido de muy bajo coste y de fácil obtención y se utiliza con frecuencia en el tratamiento de quemaduras, úlceras cutáneas y diversas patologías oftalmológicas.
La placenta se obtiene de madres sanas que consienten que se emplee para investigación. Con la colaboración del Servicio de Ginecología, la Unidad de Terapia Celular la recoge en el quirófano y la traslada al laboratorio para su adecuado procesamiento y crioconservación, hasta que se requiera para su uso clínico. Tras la preparación de la herida, y una vez relleno el defecto de partes blandas aplicando un sistema de vacío con terapia de presión negativa, se realizan los implantes de la membrana amniótica para reducir la inflamación y promover la epitelización. La experiencia preliminar tanto en modelos animales como en los casos realizados en seres humanos es altamente satisfactoria, por lo que se ha iniciado un ensayo clínico autorizado por la Agencia Española del Medicamento.
Otra de las líneas de investigación básica es la aplicación de la terapia celular en hemofilia. Quienes padecen la enfermedad se ven afectados por una mala coagulación de su sangre, lo que puede dar lugar a hemorragias en articulaciones y órganos internos de gravedad. Actualmente se están desarrollando estudios preclínicos en un modelo de ratón con hemofilia A, la más común, con el objetivo de conseguir que los animales produzcan la glucoproteína que origina la enfermedad, el factor VIII, de manera natural y el proceso de coagulación se desarrolle con normalidad. Para ello se emplean células madre de distintos orígenes.