Sangre periférica

Es la sangre que circula por el cuerpo. Normalmente, hay pocas células madre en la sagre circulante, pero cuando se administran sustancias parecidas a hormonas, los denominados factores de crecimiento, a los donantes algunos días antes de la recolección de células madre, estas crecen con más rapidez y pasan de la médula ósea a la sangre.

Para un trasplante de células madre de sangre periférica, se coloca un catéter en una de las venas del donante y se conecta a un tubo que lleva la sangre a una máquina que la separa, conservando únicamente las células madre. El resto de la sangre se devuelve al donante. Las células madre recolectadas son fltradas, almacenadas en bolsas y crioconservadas hasta que el paciente esté listo para recibirlas por infusión. Las células madre viajan a la médula ósea, se injertan y luego crecen y producen nuevas células sanguíneas normales. Por lo general, se detectan nuevas células en la sangre del paciente en un plazo entre diez y veinte días desde el trasplante.

Fuente: American Cancer Society, Trasplante de células madre (trasplantes de sangre periférica, médula ósea y sangre de cordón umbilical)